La miel ayuda a eliminar las bacterias y a reducir los poros, lo que da mayor vitalidad, elasticidad y frescura.
El bicarbonato de sodio actúa como un exfoliante natural agente que reduce la irritación de la piel y estimula la circulación de la sangre.Esta máscara es adecuada para todo tipo de piel.
Ingredientes:
– Una cucharadita de bicarbonato de sodio
– 1/2 cucharadita de miel
– Una cucharadita de aceite de oliva
Preparación:
Mesclar todos los ingredientes en un recipiente separado y agitarlo hasta obtener una mezcla homogénea.
Uso:
Aplica la máscara en la cara y dejala actuar durante 10 minutos y luego lavar con agua tibia.
Repite este procedimiento una vez a la semana para mantener tu piel suave, brillante y hermosa.
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